Canyon Enduro Extrem

El sábado salimos desde Ávila dos miembros del club (Héctor y yo) para correr nuestro  primer Enduro del año. El fin de semana se presentaba muy duro tanto por el desnivel de los enlaces hacia las especiales como por el mal tiempo de lluvia que predomino tanto en los entrenos como en la carrera.

Una vez llegamos a Patones saludamos a nuestro amigo Joan y a su colega Sergio y nos ponemos a montar nuestro campamento base a la espera de que llegara Mario que nos iba acompañar en los entrenos.

La primera subida se hace gran parte por pista y haciendo las partes mas duras a pie para ahorrar fuerzas para el dia de la carrera. Comenzamos a bajar la especial 1 a ciegas ya que las mascaras estaban completamente empañadas y sumándole un terreno empinado y de puro barro se produjeron los primeros revolcones sin consecuencias. 

Para hacer la segunda especial la organización marco una subida por un arroyo y seguido de un cortafuegos que tardamos en hacer casi 2 horas cuando el tiempo para hacerla en la carrera era de una hora por lo que al final para el domingo la cambiaron y se haría por pista.

El inicio de la especial dos tenia bastante peligro por unas losas empapadas y que yo quate al metro de montarme en la bici. La bajada era espectacular entre pinos muy muy juntos y algún paso mas de losas delicado pero divertidisimo.

Para no machacarnos mucho mas decidimos hacer la tercera especial y dejar las dos ultimas para el día de la carrera y esperar que salieran bien.

Como ya nos a pasado otras veces tampoco había duchas y los Avila Bici otra cosa no pero si hay que ducharse con la manguera de lavar las bicis en una fuente se hace,  un valenciano nos pregunto que si eramos vascos para ducharnos con ese agua helada.

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El domingo comenzó con algo de sol pero duro poco. La carrera la empezamos de lujo llegando con tiempo para las especiales 1 y 2 bajando bastante bien la primera especial, adelantando a dos corredores que salían delante de mi pero fue llegar a la especial dos y echarse todo a perder.

No había echo ni 300 metros cuando se me parte el tornillo del cambio y se dobla al engancharse con la rueda aun así pude adelantar a uno sin transmisión antes de retirarme. Pero fue llegar a un punto de la bajada en donde estaba Mario que fue hacer fotos cuando aparece Héctor con la rueda echa un 8 y el manillar doblado.

Total, final de la carrera para los Ávila Bici y a esperar que Mario nos subiese a recoger con la furgoneta, si no fuese por que nos fue a buscar  Héctor se muere de hipotermia y es que el agua y el frió no sientan bien.

(foto de los compañeros de Iberobike)

Buen fin de semana el que hemos pasado lleno de buenos momentos y de bastantes averías mecánicas. Esperemos que para la próxima prueba de enduro se de mejor que nos marchamos con mal sabor de boca...